Hay miles de hongos comestibles diferentes que son esquicitos y con un alto valor nutricional. Existen tantos tipos de hongos, se consideran al menos 14000, aunque de estos solo la mitad se puede comer.
Los hongos comestibles son aquellos hongos que pueden ser consumidos por humanos como alimento sin causar daño o enfermedades. Estos hongos se caracterizan por su sabor, textura y valor nutricional, y se utilizan en todo tipo de platos, desde sopas y guisos hasta pizzas y ensaladas.
Los hongos comestibles son una fuente importante de proteínas, vitaminas y minerales, y se han utilizado en la alimentación humana durante siglos en muchas culturas de todo el mundo. Aunque hay muchos tipos diferentes de hongos comestibles, es importante tener en cuenta que también hay muchos hongos venenosos que pueden ser muy peligrosos si se consumen. Por lo tanto, es importante ser cuidadoso y estar seguro de la identificación correcta antes de consumir cualquier hongo silvestre.

Principales hongos comestibles
Los champiñones son uno de los tipos de hongos más comunes y se utilizan en todo tipo de platos, desde sopas hasta guisos y ensaladas.
1.- Setas: Las setas tienen un sabor delicado y se pueden utilizar en una gran variedad de platos. Algunos ejemplos son las setas shiitake, las setas portobello y las setas crimini.
2.- Boletus: Los boletus son hongos con un sabor intenso y carnoso, y se utilizan en muchos platos de alta cocina.
3.- Trufas: Las trufas son hongos muy aromáticos y sabrosos que se utilizan en platos gourmet, como la pasta y los risottos.
4.- Trompetas de la muerte: Estos hongos tienen un sabor terroso y se utilizan a menudo en platos de caza.
Es importante tener en cuenta que hay muchos tipos de hongos venenosos, por lo que siempre debes tener cuidado al recolectar y consumir hongos silvestres. Es recomendable comprar hongos comestibles de origen seguro en tiendas de comestibles o mercados.
Valor nutricional de los hongos comestibles
Los hongos comestibles proporcionan vitaminas B, cobre, selenio y otros nutrientes. Si está buscando un multivitamínico completamente natural, omita los suplementos y coma hongos. Entre sus muchos nutrientes: vitaminas B, incluido el ácido pantoténico (B5), niacina (B3) y riboflavina (B2), más cobre y selenio.
Los hongos también son ricos en proteínas, fibra, potasio, vitamina D, calcio y más. Nada mal para una comida que contiene más del 90% de agua.
Otros beneficios para la salud
Los hongos aumentan la inmunidad, ayudan a reducir el colesterol y pueden ayudar a proteger su cerebro.
Ya sabe entonces que pueden hacer mucho más por su salud que alimentar su cuerpo.
- Tienen propiedades antibacterianas.
- Pueden ayudar a bajar el colesterol.
- Son buenos para su sistema inmunológico.
- Pueden ayudar a prevenir o tratar la enfermedad de Parkinson, la enfermedad de Alzheimer.
- Bajar presión arterial alta.
- Prevenir el cáncer.
Son una fuente rica en potasio
Al igual que los plátanos y las papas, los hongos comestibles son una gran fuente de potasio. Lo que lo hace importante para tú corazón, músculos y nervios.
Cuando piensas en alimentos que tienen mucho potasio, te pueden venir a la mente las bananas o las papas. Pero los hongos están a la altura del contenido de potasio. Por ejemplo: dos tercios de una taza de portabellas en rodajas a la parrilla (champiñones grandes con tapas lisas de color marrón o tostado) tienen tanto potasio como un plátano mediano.
El poder antioxidante de Porcinis
Los antioxidantes como el glutatión son abundantes en los hongos. Has escuchado durante años que las frutas y verduras son ricas en antioxidantes.
Los hongos son la fuente de alimento más alta de dos: ergotioneina y glutatión. Están llenos de estos antioxidantes, que pueden tener poderes antienvejecimiento. Los investigadores piensan que en el futuro, la ergotioneina y el glutatión pueden usarse en las enfermedades de Parkinson y Alzheimer.
Hongos Medicinales
El hongo en polvo y el extracto de hongo pueden tener usos medicinales. Estos no son tipos específicos, que no vamos abordar en este post.
Estas no son «medicinas» que recetaría un médico. La investigación aún es demasiado pronto para eso. Pero los hallazgos hasta ahora sobre los hongos como medicina son prometedores.
Cuidado con los hongos mortales
Los hongos tóxicos pueden parecerse a variedades comestibles, ¡así que tenga cuidado! Hay alrededor de 70-80 especies de hongos son venenosos. La mayoría solo te enfermará, pero algunos pueden matarte.
La mejor manera de evitar variedades tóxicas es obtener sus hongos de una fuente confiable en lugar de recogerlos en la naturaleza. Y si los elige usted mismo, asegúrese de que un experto en hongos le dé el visto bueno.
Señales de envenenamiento por hongos
Digamos que comes un hongo silvestre y luego te preguntas si cometiste un gran error. La intoxicación típica por hongos causa náuseas, vómitos, calambres y diarrea en 4 horas. En la mayoría de los casos, si bebe mucha agua, se recuperará bien en casa. Pero debido a que algunos hongos pueden ser tan tóxicos, es mejor llamar a su médico si tiene signos de intoxicación por hongos.
Adelgazar con champiñones
Los Hongos comestibles son un delicioso sustituto de carne bajo en calorías. No tienen poderes mágicos para perder peso, pero los hongos pueden ayudarte a perder peso. Eso se debe a que hacen un sabroso sustituto de carne casi sin calorías que puede combinar en muchos platos.
Conclusión
Los hongos comestibles son una valiosa fuente de alimento que se ha utilizado en todo el mundo durante siglos. Son ricos en proteínas, vitaminas y minerales, y su sabor y textura los hacen versátiles en la cocina. Sin embargo, es importante tener en cuenta que existen muchos tipos de hongos venenosos que pueden ser peligrosos si se consumen, por lo que es necesario tener precaución y asegurarse de la identificación adecuada antes de consumir cualquier hongo silvestre. Al comprar hongos comestibles en tiendas de comestibles o mercados, se puede disfrutar de su sabor y valor nutricional sin riesgo de intoxicación. En resumen, los hongos comestibles son una opción deliciosa y saludable para incluir en la dieta, siempre y cuando se tomen las medidas necesarias para asegurar su seguridad.