El Toxoplasma gondii es el responsable de toxoplasmosis en el embarazo, este parásito diminuto infecta una cantidad muy grande de especies, perros, ovejas, ratas, pollos, palomas, reses, cerdos, gatos, etc. y por supuesto a los seres humanos. Es necesario tomar todas las previsiones para evitar la Toxoplasmosis congénita.
No sólo está distribuido entre muchas especies, sino que dentro de cada una de ellas está ampliamente diseminado.

Qué síntomas produce la Toxoplasmosis
En las personas con sistemas inmunológicos normales, inmunocompetentes, la entrada del parásito por vez primera, llamada primoinfección, pasa inadvertida o provoca sintomatología leve en un 80 a 90 % de los casos; en el resto provoca síntomas, de los cuales el más característico es la inflamación de ganglios no dolorosos en el cuello o por arriba de la clavícula, puede acompañarse por malestar general, similar a una fuerte gripe, con dolores musculares y de las articulaciones, dolor de cabeza y sudoración.
Estos síntomas suelen auto limitarse en el período de un mes aproximadamente, por lo que no se recomienda el tratamiento, a menos que los síntomas sean anormalmente intensos. Haya o no haya provocado síntomas la entrada del parásito, las personas quedan infectadas pero con el sistema inmunológico alertado, lo cual evita futuras reinfecciones.
Muy distinto es el caso de la primoinfección en la mujer embarazada, o sea, mujeres que previamente no tienen el parásito y se infectan estando embarazadas. En este caso, el parásito circulante puede atravesar la placenta y provocar daños en el feto que aún tiene su sistema inmunológico inmaduro y producir una Toxoplasmosis congénita.
Otro caso distintivo es el de personas infectadas previamente que cursan con depresión de su sistema inmune, en estas ocasiones el parásito se reactiva (reactivación) y puede provocar encefalitis en la mayoría de los casos, esto se da en las personas que conviven con el HIV, en transplantados o en pacientes sometidos a terapias inmunosupresoras.
Qué papel juega el gato en esta enfermedad
Responder esta pregunta es hablar del ciclo de vida del Toxoplasma gondii, y es muy importante conocer este ciclo para saber donde resaltar la prevención.
Este parásito, el Toxoplasma gondii, utiliza distintos hospederos a lo largo de su ciclo de vida, todos son hospedadores intermedios, excepto el gato o los felinos, que son huéspedes definitivos donde el parásito se multiplica. El gato se infectará al consumir carne o vísceras con quistes, el parásito se aloja en su intestino, allí se divide y sale en forma de huevos quísticos (ooquistes) no infectantes, éstos deben permanecer en el suelo unos días para transformarse en ooquistes infectantes.
¿Como se puede contagiar el toxoplasma?
- Tocar o entrar en contacto con heces de gato infectadas. Los gatos pueden contraer la infección al comer roedores, aves u otros animales de tamaño reducido infectados
- Al ingerir carne cruda o poco cocida de animales infectados (sobre todo de cordero, cerdo o venado) las temperaturas extremas destruye el parásito
- Comer frutas, verduras u hortalizas crudas y no lavadas, que han entrado en contacto con el estiércol
- Al comer los huevos del parásito sin saberlo, que se pueden quedar en las manos después de tocar la tierra sin llevar guantes o de manipular alimentos no cocinados ni lavados
- Beber agua contaminada
A pesar de que esta infección normalmente no se contagia de una persona a otra, excluyendo los casos de trasmisión materno-fetal, en contadas ocasiones. La toxoplasmosis puede contaminar las transfusiones de sangre y los órganos donados para hacer trasplantes.
Toxoplasmosis en el embarazo que debes hacer
Como se indicaba más arriba, el único riesgo grave de una mujer embarazada con respecto a la Toxoplasmosis, es cuando ella no estaba infectada y se infecta durante el embarazo, por lo que se deduce que si le dio en un embarazo anterior no tiene por que repetirse en los próximos.
Así que no existe el aborto a repetición en la Toxoplasmosis algo que se planteaba antes con mucha frecuencia en mujeres abortadoras, ya que una mujer que pueda haber abortado por Toxoplasmosis, quedará inmunizada para embarazos posteriores.
Su condición de infectada o no, se pone de manifiesto con un simple análisis de sangre.
El análisis debe siempre ser interpretado por el profesional a cargo de la embarazada, ya que no consiste en una simple evaluación. Si diera NEGATIVO debe realizarse el examen en los tres trimestres. El objetivo principal es prevenir la Toxoplasmosis congénita
Como hacer para no contagiarte
- Cocinar bien las carnes para consumo.
- En lo posible, dejar la carne en freezer a -20º C, no congelador, durante 24 hs.
- Lavarse las manos después de tocar carne cruda.
- Lavar bien frutas y legumbres antes del consumo.
- Desechar diariamente las excretas felinas, en lo posible, que otra persona se haga cargo de esa tarea.
- Hacer trabajo de jardinería con guantes puestos.
Que sucede si tienes una toxoplasmosis en el embarazo
El seguimiento mediante estudios del suero de las embarazadas negativas (se recomienda que sea realizado en cada trimestre del embarazo) ya que permite diagnosticar una primoinfección.
Si se detecta, existe tratamiento específico que disminuye considerablemente el riesgo de la transmisión congénita. Existe tratamiento también para el recién nacido que reducen el número de secuelas y su gravedad. Cabe aclarar que no siempre ocurre infección a través de la placenta, incluso en mujeres no tratadas.
Se da una relación inversa entre el periodo gestacional en el cual ocurre la infección, con la gravedad de la misma, cuanto más cerca del parto ocurre, menos síntomas acarreará al recién nacido, ya que en el útero el feto estaba desarrollando su sistema inmune.
Pero aquí hay que aclarar además que por la anatomía de la placenta, la misma es más permeable al parásito cuanto más desarrollada esté, es decir, si ocurre la infección durante el embarazo, es más fácil que el Toxoplasma atraviese la placenta si la infección ocurre en el último trimestre antes que en el primero o segundo.
Que le puede ocurrir a tu bebé
Los síntomas en la Toxoplasmosis congénita, dependen del trimestre de embarazo durante el cual la mujer se haya infectado, y van desde el aborto, pasando por calcificaciones intracraneales, coriorretinitis, acumulación de líquido en el sistema nervioso central, retraso mental, hasta secuelas leves que se ponen de manifiesto en edad escolar.